Conforme llega el buen tiempo y las temperaturas se suavizan, las salidas en barco suelen ser de más duración. Durante estas travesías es habitual pasar la noche durmiendo en el barco, cosa que bien puede hacerse mientras el barco permanece fondeado, o mientras está amarrado en el puerto.
Un barco bien equipado es como una casa flotante, y a veces puede ofrecer incluso más. En los barcos, el espacio siempre se aprovecha al máximo, por lo que incluso si tienes o alquilas un barco pequeño de uno o dos camarotes, solo necesitas que el barco tenga un buen equipamiento para pasar una cómoda velada a bordo. Sin embargo, si no tomamos las medidas adecuadas, dormir a bordo puede convertirse en un auténtico dolor de cabeza. A la hora de dormir a bordo tenemos que tener en cuenta tanto la seguridad, como el confort de los pasajeros. Estas medidas a tener en cuenta dependerán de si pasamos la noche fondeados, o si permanecemos amarrados en el puerto.
DORMIR EN PUERTO
Dormir en el barco mientras este permanece amarrado en puerto presenta la ventaja de que la embarcación está protegida del oleaje y las corrientes, por lo que su movimiento será menor y se descansará generalmente mejor que en plena mar. Permaneciendo en puerto también ahorramos a la tripulación la necesidad de establecer turnos de guardia durante la noche.
Sin embargo, también presenta alguna desventaja. Es probable que pueda tener dificultades para encontrar un amarre en el puerto durante la temporada alta, o que el coste de estos sea demasiado elevado. Si tienes planeado pasar una o varias noches en el barco, debes llegar cuanto antes al puerto, o realizar una reserva de amarre con antelación llamando a la autoridad portuaria correspondiente.
Si decides alquilar un barco para pasar la noche en puerto, no tendrás que preocuparte de nada de esto, ya que los barcos de alquiler tienen siempre su propio amarre durante la temporada en la que se oferten.
DORMIR FONDEADOS
Para dormir bien en el barco durante estas circunstancias debemos estar seguros de que no se producirá ningún imprevisto mientras el barco se encuentra fondeado. Debemos asegurarnos de que el barco no garree por la noche, de que no se produzca un abordaje mientras dormimos, o que el viento no empujará el barco contra ningún obstáculo.
Actualmente es realmente sencillo obtener información meteorológica precisa sobre una zona concreta. Si decidimos pasar la noche fondeados en cualquier enclave, es necesario que anteriormente nos informemos adecuadamente sobre las condiciones meteorológicas y marinas del lugar elegido. Debemos saber de dónde vendrá el viento, las corrientes de la zona, la dirección del oleaje, etc. También se recomienda para estos casos estudiar adecuadamente la maniobra, estudiar el fondo marino y planear una ruta de salida en el caso de que el fondeo se convirtiera en una situación complicada.
Gracias a los medios actuales y las sondas, podemos obtener fácilmente información sobre el fondo marino, así como la cantidad de cadena que deberemos soltar para el fondeo, el tipo de fondo en el que nos encontramos (arenoso, fango, cascajo, roca, coral, etc.), o el fondo disponible para el calado de nuestro barco en función del oleaje y las mareas. También debemos tener en cuenta otros factores, como la distancia hasta la costa u otros posibles peligros que puedan existir.
También es importante tener en cuenta los barcos que tenemos alrededor (en el caso de que los hubiera), y si es posible que alguno de estos pueda abordarnos durante su borneo, o durante el nuestro a lo largo de la noche en el fondeadero.
Si programamos correctamente la sonda, esta puede llegar a sernos muy útil, ya que puede proporcionarnos información mediante sus alarmas. Nos avisará en caso de que nuestra localización varíe, o en el caso de que haya una variación en el fondo (posibilidad de que el barco esté garreando). Las alarmas anti garreo y cualquier otro instrumento de vigilancia siempre serán útiles para estos casos, ya que cuánta menos preocupación tengamos, mejor dormiremos.
ELEGIR EL MEJOR SITIO PARA EL FONDEO:
La calidad del lugar para practicar el fondeo es quizás el aspecto más importante para la seguridad y tranquilidad de la tripulación.
Para elegir un lugar lo bastante adecuado es importante tener en cuenta varias consideraciones:
- Que el lugar esté bien resguardado de la costa.
- Que el lugar esté a resguardo del viento y del oleaje.
- Que sea un lugar amplio que permita zarpar rápidamente en el caso de que tengamos que hacerlo.
- Que sea un lugar con un fondo de calidad para el fondeo. Los más recomendables son los fondos de arena, de fango, mientras que los menos recomendables son los de arcilla, roca o algas.
Una vez hayamos escogido un buen sitio para fondear, es cuando comenzamos la maniobra.
Lo primero a tener en cuenta es que la fuerza que ejerza el ancla y la cadena debe ser superior a las fuerzas producidas por el viento, la corriente u otros elementos. La resistencia que opone el ancla va en función del ángulo que forma la cadena respecto al fondo. Cuanto mayor sea ese ángulo, mayor será la fuerza de oposición del ancla. Para disminuir el ángulo que forma la cadena con el fondo habrá que soltar la cantidad de cadena suficiente para que forme la mayor curvatura posible.
En el caso de no elegir un buen fondo, o que no hayamos filado la suficiente cantidad de cadena, es posible que el ancla garree, es decir, que se arrastre por el fondo sin llegar a clavarse del todo. En el caso de que esto pase, debemos echar el freno del ancla, y dar unas paladas atrás para asegurarnos de que el ancla se clava en el fondo.
Cuando fondeamos, también es de suma importancia no hacerlo demasiado cerca de otras embarcaciones. El viento, por ejemplo, no es algo constante y puede variar rápidamente de dirección, y producir lo que se conoce como el borneo (cuando el barco se mueve alrededor del ancla por acción del viento o la corriente). Para evitar que el borneo acabe en una colisión u abordaje, es importante establecer un círculo de seguridad, cuyo radio será igual a la cantidad de cadena filada.
En caso de que fondeemos en sitios con poco espacio y embarcaciones cercanas, deberemos echar un anclote o muerto en la popa para evitar el borneo.
Es recomendable también comprobar cada cierto tiempo que el barco no está garreando. Para comprobar que no se produce, tomaremos varias marcaciones a puntos de tierra y referencia de la sonda bajo la quilla. Si alguno de estos valores varía, nos indicará que realmente nos estamos moviendo de nuestro fondeadero.
Si por algún motivo nos vemos obligados a fondear en fondos de roca es muy recomendable poner un orinque al ancla (un boyarín para balizar la posición de esta).
Por último, también es importante que durante el nuestra estancia en el mar encendamos las luces de fondeo establecidas por las RIPA (Reglamento Internacional para la Prevención de Abordajes).
ELEGIR LUGAR PARA DORMIR EN EL BARCO
Una vez hayamos decidido el fondeadero, después de haber realizado la maniobra y dejado el barco bien anclado al fondo, toca decidir en qué parte del barco vamos a dormir.
Las cabinas de proa suelen ser la mejor opción para conciliar el sueño, tanto si estamos fondeados como si estamos en puerto, ya que suelen ser las cabinas más secas y aireadas del barco.
Sin embargo, en el caso de que estemos navegando, la proa será el peor lugar con diferencia, ya que esta se moverá mucho más, más aun si hay mala mar. Si dormimos mientras se navega, las cabinas centrales y de popa son las más recomendables, aunque en la popa se suele situar el motor, lo que significa que en la popa también habrá más ruido. En estos casos es recomendable llevar tapones para los oídos.
Para las personas que sean más altas que quieran dormir en barcos de poca eslora también existe una buena solución un tanto olvidada: las hamacas. Presentan la ventaja de ser secas, ventiladas, cómodas, y además no estorban cuando no se están utilizando.
Si vamos a dormir en el barco durante la navegación, también es importante incluir las lonas anti caídas, que se usan tanto para la estiba de objetos y que estos no caigan durante la travesía, como para evitar caídas desde la cama.
OTROS CONSEJOS PARA DORMIR EN EL BARCO:
-No olvides los tapones para los oídos si tienes un sueño ligero y eres fácil de despertar.
-Es importante tener el lugar ventilado, incluso en invierno.
-Llevar loción antimosquitos, o un quemador eléctrico. Nos habitual encontrarlos si fondeamos en el mar, pero si permanecemos amarrados en el puerto, estos insectos pueden convertirse en un auténtico problema si no tomamos medidas.
-Tanto si pasamos la noche fondeados, como si estamos amarrados en puerto, será conveniente tener vestimenta adecuada, ya que por la noche, en el mar, se siente más el frío debido a la humedad. Por este motivo tampoco está de más llevarse un saco de dormir.
-Debemos cambiarnos de ropa al entrar al camarote, para eliminar toda humedad que hayamos podido traer desde la cubierta del barco. Se recomiendan las prendas de algodón o las prendas térmicas.
-En el caso de que vayamos a dormir navegando, o fondeados, es importante organizar bien las guardias. A menos que las condiciones exijan algo distinto, o a menos que no tengamos suficientes relevos, los turnos deberán ser de 3 a 4 horas.
Como habrás podido comprobar, un barco puede llegar a ofrecer los mismos lujos, comodidades y confort que cualquier hotel o casa, e incluso puede ofrecer un plus en privacidad. Si quieres disfrutar con tu pareja o amigos de la intimidad y el confort siempre puedes alquilar una embarcación y disfrutar de tu noche en barco para dos. Pasa una inolvidable noche romántica en barco o disfruta con amigos de un fin de semana en barco.
Esperamos que estos consejos y pistas puedan serte útiles a la hora de planificar tu viaje en barco. Si quieres conocer la costa malagueña de una forma distinta y vivir una aventura única podrás alquilar un barco en cualquiera de los puertos de Málaga, en el caso de que no dispongas de embarcación propia. Un barco bien equipado puede ofrecer todas las comodidades que necesites, por lo que busques lo que busques, podrás hacer una cena romántica en barco, pasar un fin de semana a bordo y dormir en diferentes puertos, organizar fiestas y eventos, o cualquier otra actividad que quieras realizar a bordo.